Fuimos y somos testigos .

"El muerto se llamaba Pablo Vergara Toledo, el tercer hermano-.Sera cierto? , como se podria saber cuando en 1988 debido a la falta de libertad de prensa, a la inexistencia de un Congreso y de la escasa independencia del Poder Judicial en ese periodo?. " Lamentablemente tenemos vivir entre tanta mentira, en 1988 existían muchos más medios de difusión que los hoy permite la democracia de "la concertación", la existencia del Congreso en los actuales términos, con una oposición pusilánime y débil,no es garantía de nada, ¿ Independencia del poder judicial? .Fuimos y somos testigos, del comportamiento del la izquierda y sus esbirros violentistas. Los padres de los Hermanos Vergara Toledo, han reconocido y se sienten orgullosos de lo que sus hijos hacían. Las consignas de los celebrantes del "día del combatiente" son claras: Ellos no lloran sus muertos, reivindican la violencia como una arma de lucha, y sus muertos son héroes de la revolución (sic). Confundir y hacer usos propagandistas de las muertes de los terroristas es el único afán que motiva a los izquierdistas. Reitero, la vida para el izquierdismo es un accidente y morir "por la causa" es un buen fin para consolidar "el progreso" de ella .

El reclamo justo es..."libertad para los que nos liberaron de la violencia terrorista".